hacer cosas tiene muchas ventajas: el entretenimiento de hacerlas, el sentimiento creativo, y el resultado final. ésto último es lo menos placentero, a menudo. da igual que hagas una mesa con maderas, una tarima de palés, un libro, un disco o el amor. hacer es vivir. pero en este orden creativo, hay cosas que no puedes hacer sólo por ti mismo, y no hablamos del amor exactamente. ayer mismo recibimos las primeras mezclas del disco. hay pocas sensaciones equiparables a la satisfacción de la curiosidad, o bien pensado, a cualquier tipo de satisfacción. suponemos que por eso nos gusta la novela negra, aunque casi todas acaban de la misma forma. ayer el crimen eran canciones y el asesino un señor inglés. y resultó ser un crimen casi perfecto. las expectativas son el peor enemigo, el típico falso asesino, de quien sospechas nada más aparecer en escena. que se lo digan a este país en el partido inaugural del mundial contra suiza. o a almodóvar en cannes. o a lady gaga. en este caso, nosotros, que ya hemos pasado tres veces por esto, teníamos bastante pocas, y aún así, en estas cosas pasa como cuando te examinas y aún sabiendo que no has contestado ni a la mitad de las preguntas, todavía esperas que quizás todas las respuestas, por pocas que contestaste, estuvieran bien y te aprobaran. cosa que nunca sucedía. el caso es que empezamos a escucharlo a la defensiva, pensando en lo que íbamos a echar en falta, en las pegas que íbamos a poner. somos de ese tipo de gente, qué le vamos a hacer. a medida que iban pasando los temas, sin embargo, la mayoría de las dudas se habían alejado, y empezamos a tener la sensación, el pálpito de oír los temas por primera vez. y ese momento de libertad es la vida. que libertad más burguesa la de los artistas. una cosa: se nos ha ido la mano con la energía. parece que disfrutamos demasiado, y que salieron rayos de los dedos, como a los superhéroes. qué raro tener que decir ésto cuándo llevas 10 años intentando que un disco suene rocoso a la vez que bonito. quién nos lo iba a decir, amigos. hoy es un día alegre, a ver lo que dura.