clint en rockdelux

"amigo no se lo tome a mal..." la frase, pronunciada por un constantino romero disfrazado del actor clint eastwood pro obra y gracia del doblaje, es una de las escasísimas concesiones al lenguaje oral que los madrileños hacen en su reencuentro con los instrumentos polvorientos tras su estreno con alégrame el día. también se puede escuchar un sonoro olé rematando negro zaino..., pero no es más que una excepción en un trabajo que, con un pie en el desierto y otro en la ciudad, recorre el camino que va de john barry a morricone deteniéndose a repostar en nino rota y calexico. sin palabras y con una elegancia digna de elogio, el cuarteto se sirve de su pasión por clint eastwood - no les llamen por su nombre; sólo responden a los apodos de harry el sucio...- para desplegar un universo sofisticado y fronterizo donde el trémolo de las guitarras responde al canto mariachi de las trompetas y la melodía de el padrino se transforma en un intrigante lamento de piano y vientos. vale, puede que no sea el disco más indicado ni para los tipos duros ni para bailar, pero merece la pena perderse entre sus melodías de alto voltaje cinematográfico.