antes de meternos en el búnker, amigos, queríamos saludarles. ya saben que las grabaciones son la antimúsica, la cosa más aburrida, repetitiva y molesta que existe, después de los discos de james blake. el caso es que vamos a encerrarnos ahí unos días, bastantes y seguidos, por primera vez, así que esperamos capturar el ambiente del momento, la energía que fluya en la sala, y, sobre todo, esperamos acabar las canciones tal y como las llevamos. porque el estudio es como el viaje de frodo a mordor, está lleno de peligros, trabas y pruebas que hay que ir superando. por suerte, como ya les hemos contado, tenemos al capitán fixsen para guiarnos por donde los orcos pasen de largo. lo que es seguro es que no habrá ni una palabra hablada o cantada. seguimos a pies juntillas lo que dice luke haines, así que, la poesía de las letras la dejamos para el siguiente. y como estamos en la generación 2.0, hemos abierto un twitter, twitter/clintband, porque hoy no es hoy, sino mañana. no somos muy de hablar, pero intentaremos ponerles al tanto de la actualidad instrumental. no sabremos quién ganará la semifinal de la champions, qué pasará con la boda real, quién acabará con la corbata en la frente, o abrazando a los invitados, aunque, como todos son de por allí, suponemos que habrá toneladas de litros de alcohol y millares de bobbys para cuando se hayan bebido hasta el pis y empiecen a patearlo todo entonando el himno. no nos enteraremos de si españa vuelve a estar en el punto de mira de los especuladores, o de si vamos a recuperar el pleno empleo el mes que viene. la verdad es que así contado, no saber nada suena de maravilla. la única pena es que las cuatro magnums van cargadas y que todos somos igual de rápidos al desenfundar. y eso en un estudio lleno de hombres es como ver a saruman. una verdadera pena, si todos acertamos. esperemos que no, y que volvamos a escribirles de vuelta a la realidad civil. que lo disfruten mientras tanto, si son capaces. hay que ser valiente.