amigos, con la histeria calificativa que se impone, tasamos nuestras gripes como AAA+, aunque el médico, verdadero agente calificador, nos las rebajó tanto que perdían el mismo nombre de gripe. así que nos sentimos como papandreu, como berlusconi o como el desaparecido zp. tristes, ojerosos, mirando culos sólamente por pura deformación viril, sin siquiera atenderlos o imaginarlos. putas calificaciones, qué malos ratos te hacen pasar. para que luego digan que el abecedario no es importante, que lo que hay que saber es de matemáticas. menos mal que tenemos el bachillerato de excelencia, en el que hemos oído que se imparte griego, latín y se canta adeste fideles. en cuanto a la música, que parece que no importa, les diremos que no ha cambiado mucho. es lo que tienen las grabaciones. si no la hubiéramos dejado estática, ahora mismo sería otra cosa, probablemente peor, más intrincada, más elaborada, menos fresca. no se puede sobar mucho las cosas. lo hemos entendido grabando el videoclip que acompañará a nuestro primer falso ¡single! no entendemos cómo se puede repetir cien veces una toma y que cada vez que se repite siga teniendo frescura en vez de ir convirtiéndose en algo rígido y manoseado. suponemos que los actores tienen esa virtud. hay que vivirlo para apreciarlo, como en casi todo. estamos preparando un ataque frontal, amigos, por varios frentes visuales y auditivos, preparándolo todo para que nuestra aburrida música de ascensores rockeros llegue a sus oídos, a sus ojos, a su corazón. nosotros ya saben que lo hemos dado todo y que en la música el esfuerzo es inversamente proporcional a la recompensa, pero nadie hace música instrumental por dinero, a menos que sea para amenizar cócteles, poner tensión en películas o series o interpretar a los clásicos en auditorios. y por ahora, no entramos en ninguna de esas tres categorías, muy a nuestro pesar. no pasa nada, nosotros pagamos por hacer rock, algo que bien pensado suena muy muy mal. pero otros pagan para que les azoten, o les meen, así que no está mal después de todo, ¿no les parece?
p.d: sentimos el cutrevídeo, pero nuestra nula capacidad no nos permite mayor calidad de documentación.